Aunque la sensación de sed es la que nos empuja a ingerir líquidos, los expertos advierten que no es aconsejable esperar a tener sed para beber. Precisamente una reciente encuesta ha revelado que, al menos en nuestro país, existe una falta de información sobre las necesidades de hidratación, ya que el 70 por ciento de los españoles bebe menos de dos litros de líquido al día.
- Bebe entre dos y tres litros de líquido repartidos a lo largo del día.
- Si no eres muy aficionado a beber agua, puedes combinar otros tipos de líquido como zumos, batidos, refrescos, infusiones, así te será más fácil.
- Es importante que no pases mucho tiempo sin beber, sobre todo si vas a estar al aire libre y expuesto al sol.
- Evita salir en las horas de máximo calor. De doce a cuatro lo mejor es permanecer a la sombra, o en lugares frescos y ventilados.
- Si practicas algún deporte o realizas algún esfuerzo físico, aumenta la ingesta de líquidos. Lo mismo si sudas más de lo habitual a causa del calor, la humedad…
- Limita la ingesta de bebidas con contenido alcohólico porque el alcohol tiene un efecto deshidratante.